Mi hijo no quiere ir al cole ¿qué debo hacer?

El post de esta semana viene con novedades. Es el fruto de una colaboración con Santiago Salvatori de Psicología para Todos, a través de la cual compartimos opiniones sobre un tema tan recurrente en las familias como la fobia y las dificultades escolares.

A continuación os dejo las líneas de Santiago:

Todos lo hemos hecho alguna vez, y los padres saben que detrás de un “Me duele la barriga, no quiero ir al cole” matutino, se esconde un “Hoy no me apetece ir al cole”.

Si bien simular estar enfermos para no ir al colegio es algo común a cierta edad y forma parte del proceso de crecimiento, cuando esta excusa se vuelve frecuente hay que prestarle más de atención por si tratase de algo más serio que una pequeña mentira.

Hay varias razones por las los niños no quieren ir al colegio, y es importante conocerlas para solucionarlas y retomar la asistencia regular.

Señales a tener en cuenta

Sin embargo, hay niños que además de estas excusas habituales pueden presentar signos de desbordamiento emocional, mostrándose  enojados, desafiantes o agrediendo física o emocionalmente en los momentos previos antes del cole. Este tipo de comportamiento podría ser la primer señal de alarma.

Así mismo, existen otro tipo de situaciones que sumadas a la negativa de ir a la escuela deben ponernos en guardia como por ejemplo:

• Posibles dificultades para dormir
• Una necesidad excesiva de estar “pegados” a padres o cuidadores
• Pedidos de ir al trabajo con los padres o quedarse en casa con ellos.

Descartar problemas físicos

Si notamos que la excusa de los dolores se repite, lo primero que tenemos que hacer creer que el niño está diciendo la verdad. Por este motivo debemos descartar cualquier problema de salud física acudiendo al pediatra. Una vez descartado el problema físico comenzará la labor casi detectivesca del adulto para intentar encontrar la causa que lleva al niño a evitar ir al colegio.

¿Por dónde comenzar?

Lo primero es involucrar a todos los adultos que están en contacto cotidiano con el niño, ya sea el otro progenitor, sus cuidadores, sus maestros o cualquier otro equipo escolar.

Luego debemos comenzar nuestra “investigación”. Si no tienes claro cuáles son los temas sobre los que deberías indagar te dejo un pequeño resumen de los más comunes, junto con algunas preguntas que pueden guiarte.

Estrés académico

• ¿Puede estar sintiéndose abrumado o con ansiedad previa a los exámenes?
• ¿Está teniendo una buena relación con los profesores, maestros y el resto del personal escolar?
• ¿Podría estar teniendo algún tipo de dificultad de aprendizaje (dislexia, discalculia,disgrafía)?
• ¿Podría estar teniendo dificultades para ver o escuchar correctamente la lección?

Estrés social

• ¿Está sufriendo acoso o bullying?
• ¿Es particularmente introvertido, vergonzoso o muestra nervios excesivos ante las interacciones sociales?
• ¿Los amigos del niño también suelen faltar a clase frecuentemente?

Estrés familiar

• ¿Está la familia atravesando algún momento particularmente estresante (mudanza,separación,nuevas parejas,etc)?

Puedes indagar si se trata de alguno de estos casos y una vez que lo tengas una idea, consultar con un profesional para que pueda orientarte sobre cómo actuar para resolver o sobrellevar esta situación que evidentemente está afectando al niño.

No le des demasiadas vueltas, en estos casos siempre es mejor prevenir que curar.

Si queréis encontrar más post como éste, lo podéis hacer en la web http://www.psicologiaparatodos.net/

O en sus redes:

Fuente:

• Kiff, C. J. (February 15, 2019). “My tummy hurts again”: Decoding Children’s School Avoidance. Link