Confinados hasta nuevo aviso

Dos semanas desde que el gobierno decretara el estado de alarma y ordenara el confinamiento a nivel nacional. Un periodo de aislamiento que se vio alargado cuando el congreso de los diputados aprobó la extensión del estado de alarma por otras dos semanas más. Llevamos 14 días encerrados en casa. Nos quedan, por lo menos, otros catorce más.

Sin comerlo ni beberlo las familias nos hemos visto encerradas en nuestros propios hogares. Además teletrabajo, clases online, deberes en la nube… hay un montón de cosas nuevas a las que debemos adaptarnos y que suman para que la situación sea un poco más complicada todavía. Estos últimos días han sido un ejercicio familiar de creatividad, organización y auto-conocimiento.

LUZ EN LAS TINIEBLAS

Esta situación de confinamiento está llena de datos y estadísticas negativas. Está siendo un ataque brutal de un virus que va a hacer mucho daño al mundo globalizado en el que vivimos. Sin embargo, como suele ocurrir en situaciones de crisis globales, la humanidad ha sabido buscar fuerzas y sacar lo mejor de si mismo.

• Creatividad al rescate: Los primeros días de confinamiento han estado llenos de música, juegos, y retos que la gente ha organizado en sus casas. Actividades pensadas para pasar el rato, matar el aburrimiento y despejar la mente. Para los más afortunados estos transcurren en terrazas o patios, pero hay recursos muy ingeniosos para salones, cocinas o comedores también. La creatividad está aflorando para ayudarnos a sobrevivir, tanto física como psicologicamente, y adaptarnos lo mejor posible al entorno nuevo. Una vez un amigo me dijo que la clave de la creatividad se encontraba en el desequilibrio. Quizás tuviera razón.
• Ayudar por vocación: en un país cerrado a cal y canto, que ha disminuido su actividad a los mínimos necesarios, hay una serie de colectivos profesionales que están sacando adelante la situación con su trabajo, esfuerzo y dedicación. Los más visibles son los sanitarios, expuestos diariamente y en contacto directo con el virus. A los que debemos estar agradecidos de tener la vocación de cuidar de otras personas. La ciencia y la medicina deben ser pilares fundamentales de una sociedad coherente. En este contexto, es importante destacar también la labor de mensajeros, panaderos, personal de limpieza, policías, bomberos y un largo etc… que siguen acudiendo a su puesto de trabajo rodeados de incertidumbre y en una situación en la que es difícil mantenerse concentrado. Gracias a todos.
• Quedamos en la Nube: Seguramente en los últimos días hayáis utilizado el Skype, el Zoom, el Teams o algún programa similar para tener una videollamada grupal con vuestros amigos o familiares. Quizás incluso ha sido la primera vez que habéis usado alguna de estas aplicaciones (conozco casos así). En mi grupo de amigos por ejemplo hemos establecido una rutina en la que cada noche a la misma hora se hace una llamada grupal y el que puede se une. Curiosamente ahora que estamos encerrados sin poder salir estamos más conectados que nunca. Sorpresas te da la vida.